Algo de lo que no espera… o De las tormentas que vienen…

¿Si pudo encumbrar a Felipe… se podrá encumbrar a ella misma…?

“Que cosas tiene la vida Mariana, que cosas tiene la vida…” que ahora vemos al PAN en las mañas que tanto repudió al PRD y que denostaba como prácticas de “arrabal…” la aristocracia política ha caído a los andurriales de la denostación, el conflicto irracional, la negación sin fundamento… ¿llegarán hasta a los ridículos extremos del Sr. López?

Vea si no, o mejor dicho, recuerda haber visto al presidente nacional del PAN recorriendo las calles de San Luis Potosí, a favor de la clara perdedora, que por ciento nada clara la buna Sonia, Sonia Mendoza Díaz, que nunca aclaró lo de las fianzas de su natal y querida Matehuala, tierra de sus amores, desatinos y desvaríos…

Vea si no, como el despreciado de Preciado Rodríguez, Jorge Luis Preciado Rodríguez, se encona en una terquedad que, en derecho, porque en lo electoral ya lo está, habrá de resolver el tribunal hasta el que lleguen los recursos de los mexicanos y la terquedad y falta de inteligencia. Ya perdidos, más les vale una elegante retirada, un buen arreglo político o la denostación de los votantes y sus propios seguidores.

Siempre se me ha hecho inútil y un desperdicio, correr desesperadamente hacia primera, cuando la bola ya está en la buchaca del alargado guante y el pie presiona la almohadilla… dicen que es mostrar coraje… cuando lo inteligente es saberse retirar a tiempo, ahorrar energía para mejores días. “Sabia virtud de conocer el tiempo…”.

Pues así, hasta ahí ha llegado el buen PAN del Manuel Gómez Morín que se escinde del partido hegemónico allá por el 39 del siglo pasado, con una ética política que parece solo él conocía y practicaba, porque los que se dice sus sucesores o herederos de hoy… véalos usted… cierto, mientras privó esa ética, nunca llegaron a nada, ni tan siquiera a la santidad política…

Y ahí siguen los herederos de la institucionalidad fundada e instaurada por Francisco Plutarco Elías Campuzano., haya o no sido culpable final de la muere de Álvaro Obregón Salido, esas decisiones y férreas actuaciones, nos han dado, a pesar de muchos, el México de hoy. Por cierto, el Sr. Gómez Morín comulgaba ferviente y asiduamente en esos altares de la civilidad.

La escisión de Gómez Morín, fue la primera trascendental, hubo otras que no alcanzaron pena ni gloria y si acaso unos renglones en la historia (oficial). Con hábiles acciones políticas, arreglos y concesiones, el partido hegemónico se mantuvo hasta que la llegada de los “tecnócratas” que, aunque decían que había que hacer “política, mucha política”, nunca supieron hacerla como sus antecesores. Nunca supieron cambiar a tiempo, ni en la dirección debida.

Así, el Partido Hegemónico fue pavimentando en sus propios campos, las avenidas de la deserción que lo ha debilitado y doblegado. Pero las incapacidades mostradas por los escindidos, prueban que los inconformes no saben hacer política de la calidad de los originarios y sus herederos.

Quien me ha seguido, digan lo que digan del gobierno, y que “escarben con la trompa en la humedad” para hallar casas blancas, casas en Malinalco y algo más, el partido en el poder, por la decisión de los electores y el funcionamiento de las estructuras políticas, sigue, aún mejor, en el control…tal y como lo había escrito hace meses.

Esto, esto hay que meditarlo, analizarlo…

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