Están sucediéndose grandes cambios en todos lados. Aquí, solo uno, y en parte

A mi amigo “El Hereje.”

Seguimos con Doña Concepción, que como todos, llenos de defectos, en ella destaca su bondad y solidaridad, no con sus amigos, para con sus prójimos.

No sé cuánto vaya a durar o cuánto más lo dejen vivir, pero está resuelto en una institución eclesial realmente diferente a la dogmática e inflexible actual.

Rezar cada quien a su concepto de Dios, implica un cambio estructural der las partes más formales de la iglesia; cosa diferente, y en veces muy distante, de la religión, de la prédica que la origino.

Recordemos que las creencias que nos heredaron, inculcaron, provienen desde lo más antiguo de los habitantes de la vera del Nilo en la ciudad de Amarna, entre Menfis y Tebas; y de Asia Central, a la vera el Tigris y el Éufrates, en la ciudad de Ur. Ambos, la gran cuna de la civilización occidental

Los personajes, respectivamente, Akenatón y Abraham, al parecer, contemporáneos, líderes sociales y por ello políticos, impulsaron el monoteísmo, de manera tal, que aún domina al actual occidente.

Falta investigación, pero la está habiendo y la habrá, para definir si eran uno mismo o trabajaron muy de cerca. El absolutismo se justifica y respalda mejor en el monoteísmo, que en el politeísmo, y si a mí me gustan los dioses griegos no es por el politeísmo, es simplemente que, con mucho poder, eran muy similares a nosotros… si hay un dios creador, supongo, creó a su imagen y semejanza. ¿Porque habría de crear malo, y para padecer… los muchos por los muy pocos?

En toda esta gran complicación o maraña, históricamente poco definida, se recurre a lo inexplicable: a lo divino, que para gracia de los dirigentes religiosos, no es discutible, lo que por acá llamamos dogma. Entramos así en terribles faltas de claridad y en la plena inutilidad del razonamiento, de análisis inductivo y deductivo, que es, o que en todo caso, según yo, más lo que más nos acercaría a esos dioses, a los que nos cubren con velos opacos; prohibidos de alzar, prohibidos de remover…

Mi Dios, no sé si lo tengo, no es todo poderoso, bueno, castigador, vengativo, rencoroso, rodeado de ejércitos y de enemigo al que algún día vencerá enviándolo al fuego eterno… Contradicción tras contradicción incompatibilidad con incompatibilidad.

Si yo pudiera diseñar un Dios, como otros lo han hecho, no se parecería a los que nos han descrito, imposible estar en permanente contradicción: omnipotencia, prepotencia e impotencia. Bondad a sus creados que mueren de hambre, frío y sed; hundidos en la ignorancia, el error y la imposición de las grandes contradicciones, de sus religiones, de sus oficiantes y de sus supuestos hermanos próximos.

Mas sé, cómo no lo puedo aceptar, que cómo podría imaginarlo o desearlo. Acabo por no entender… mas, me niego a refugiarme en la creencia de una falacia mayor, dentro en un reinado de la ignorancia y la ceguera, en el mejor de los casos impuesta… más me niego a ello, que a no acertar a definirlo y, seguramente, será indefinible porque, a fin de cuentas, nosotros somos indefinibles.

¿Rezo con mi supuesto Dios?, no lo sé, me duelo de las inmensas diferencias, de la inconmensurable imposibilidad, del fracaso rotundo de todos los que creyendo en un dios contradictorio en sí mismo, sintiéndose su representante, nada han realmente hecho en los siglos de los siglos… amen. Mi enojo es con “el hombre. El Dios de mis predecesores, de mi comunidad, nunca me ha logrado ponerme racionalmente contento y mucho menos, conforme y esperanzado.

Buen, contradecirse permanentemente: guerras, cruzadas, ejércitos, asesinatos, hurtos, posesiones, intrigas, traiciones, falsos testimonios, lujos, amores y amantes, y más y más, mientras velan, oscurecen la razón de aquellos a quienes dicen servir… y les piden que crean, simplemente, porque ellos lo dicen… que sufran y soporten… que allá… más allá les será compensado… quizá con un sincero, sentido y profundo “perdón…”

 

La conciencia

Capacidad del entendimiento, la inteligencia, de percatarse de un suceso, propio o ajeno, que se sucede con repercusiones, generalmente múltiples, sobre variables y constantes que conforman nuestro entorno y de las que, el sujeto, realiza valoraciones y puede sustentar acciones consecuentes, con bases socioculturales.

De este percatarse, vía el raciocinio o análisis del suceso y del entorno, por el instrumento que llamamos razón, resulta una valoración objetiva y otra subjetiva.

La valoración subjetiva, toma en consideración una serie de elementos con los que el sujeto fue y se socializó, es decir la cultura de su entorno o la “moral”, costumbres de la comunidad, de la “casa” en sentido amplio. Lo que algunos denominan “formación”

Así, el sujeto llega a considerar, con base en las costumbres morales o “valores axiológicos”, la manera en que el suceso afectó a las variables y constantes, para “bien” o para “mal”. Este bien y mal resulta de una sucesión de posturas milenarias, que tienen sensibles variaciones en diferentes partes de la sociedad global.

Occidente no tiene los mismos “valores” o “costumbres” que los que muestran sostienen y defienden las milenarias culturas del Asia oriental o del Subcontinente Asiático; nombrando únicamente las más evidentes, porque hay muchas y múltiples; entre ellas las reminiscencias de las culturas precolombinas y el terrible peso castrante de la cultura católica incapaz de “destruirlas” totalmente.

Vale señalar que algunas culturas aseguran ser las únicas y verdaderas, mientras que otras únicamente señalan algo así como, respeta lo que yo pienso, y en consecuencia hago, y seré directamente recíproco. Piensa lo que quieras, pienso lo que quiero, convivamos en lo que coincidimos, respetémonos en lo demás.

Las culturas principalmente beligerantes e imperativas son las generadas en la cuenca mediterránea y, básicamente, las monoteístas, las que han generado las más cruentas y sangrientas guerras religiosas.

Así en occidente se ha desarrollado el concepto de que conciencia como algo de origen divino, “insuflado”, “soplado” “otorgado” por Dios, como un listado de deberes con castigo, remordimiento, o premio, paz y serenidad, según la repercusión de nuestros actos. Dicen que no es nuestro razonamiento y discernimiento lo que, logra el juicio, la valoración y su consecuencia, esto viene del más allá, es impuesto, no tenemos derecho a pensar ni a analizar sobre de ello, es algo dado y debemos soportarlo, aceptarlo y operarlo, porque sí, ¡es dogma!.

Hay valoraciones parciales e integrales, y es ahí donde nos acomodamos: yo soy un generador de empleos, hago bien a la sociedad mí conciencia, raciocinio, en mu esquema cultural, me genera satisfacción, paz. Veamos algo un tanto más integral… generas empleos, pero las condiciones resultantes para los empleados pudieran no ser generadoras de paz.

Yo colaboro con mi comunidad, pero nada que pudiera decidirse, puede suceder sin mi “calificación” y, así, opera la oligarquía… En fin la conciencia no es nada más allá que la aplicación de mi análisis racional, propositivo o no, sobre las bases de mi paradigma.

Hace ya algunos lustros, más de los que yo quisiera, y más de los que algunos se imaginan, la semana laboral corría de lunes a sábado y el domingo era todo el descanso; los niños iban al parque, algún día de campo, según la estación, a algún lugar realmente cercano como Pozos, Escalerillas, Maravillas; Bocas ya era lejos… otros deambulaban por los alrededores; un paseo era ir al inicio de la carretera que salía a Lagos de Moreno, ahí nada más, y habría, en otoño, que cortar unas florecillas de agradable aroma, de color blanco y pocos pétalos, que florecían por la tarde. Era avezado caminar por la loma hasta el monumento de la “aviatriz” mexicana. Pasaron los años, y toda esa área pasó a manos de la UAP, luego de pleitos personales y políticos más oscuros que claros, que encabezaron Carlos López, reputado como dueño y Manuel Nava, rector a la sazón y con supuestos derechos legítimos. El Sr. López terminó yéndose de SLP y el Dr. Nava engrosó los haberes universitarios. (No puedo hacer punto y aparte) Así, y con el tiempo, creció la Universidad, en términos físicos y una zona fue destinada a la colonia de los maestros universitarios. Con estos avances urbanos comenzó el peregrinar del monumento en cuestión; algunos se enfadaban, otros sentían que movían la historia y, a los más, ni les interesaba y ni cuenta se daban. Yo seguía su movimiento, no se si en afán morboso o con algún interés de saber sobre las constancias del pasado, y, peregrinó un poco más por el rumbo hasta que, y fue la última vez que lo vi, vino a quedar en el jardín de la casa particular del Sr. Guillermo Medina de los Santos quien, en ese entonces, se comprometió ante el gobernador en turno, a velar por su existencia. No puedo precisarlo, pero creo que hubo alguna corta época en que se consideró extraviado. El Sr, Lic Medina, quien siempre me distinguió con su deferencia, fue menos efímero que el gobernador, guardián del pasado. Lo siguiente, es ya historia reciente no registrada por mis neuronas, no sé si la familia tuvo algo que ver y lo instalaron en lugar neutral… eso que lo narre otro, debe haber quien lo sepa, falta y tenga voluntad de comentárselos…

Las miradas…las reacciones correspondientes y complementarias

Pues en las reflexiones de la vejez, me ha dado por recordar a personas como Manuel Santos, que me decía que no se explicaba cómo no me habían “roto el hocico” luego de mirar así a las señoras de la fiesta.

Siempre he mirado como miro, nunca ha habido en mi ver morbo o lujuria contenida, creo que en todo caso es una respuesta que responde puntualmente a mi automática o instintiva operación bioquímica que nunca puede disimular o fingir… ni en ello llevo el cinismo…

Pero… lo cierto es que últimamente se han dado en hace explícito y notorio el “asedio” que dicen sentir las mujeres por parte de los hombres, quienes las acosan “despiadadamente” con la vista, las palabras y, a veces, con acciones agresivas.

Creo que solo en parte tienen razón, se olvidan que también mujeres las asedian y que no han realizado una visión integral e lo que sucede. Lo que se sucede es algo que simplemente puede llamarse “respuesta complementaria” o reacción instintiva involuntaria, pero incontenible con que se responde a los estímulos exteriores o del entorno cercano.

Dos seres complementarios por el comportamiento normal de la naturaleza, por sus designios, son enérgicamente impelidos a reproducirse, lo que garantiza la supervivencia de la especie, se desenvuelven en entornos “civilizados” que llevan a la contención y al fingimiento, que hasta puede afectar el buen pensar y el estado físico, o la hipocresía y el cinismo… pero el imperativo existe, se manifiesta, y no se mengua, no desaparece.

La atención se llama por el olor que se produce por el efluvio de las feromonas, y estas se muestran o no, dependiendo, básicamente, de la diversidad genética que exista entre los dos seres y de la apreciación, adicionalmente, en el caso de la mujer, de la fuerza y del sentido de seguridad que advierte en el hombre y, en el caso de éste, a más del llamado hormonal, en la apreciación que toma de la mujer, para ser madre y compañía, compañera.

Asombros

Pues aquí observando y, como decían en mi pueblo, “de asombro, en asombro”; con una gran diferencia, estas, eran generalmente moralinas, producto de la doble conducta con que se vivía y, creo, aún se sigue viviendo por aquellos lares, en ellos más que en otros, que es lo que lo destaca…

Lo probablemente más persistente es la pusilanimidad del gobernador de Oaxaca, donde la policía protege pertinazmente, “en fragancia”, a los delincuentes ensoberbecidos; es asombroso cómo los ven violar la ley y los protegen para que su hacer sea seguro y efectivo.

Nada, nada pasa. Ahí es donde debería estar la fuerza pública federal, ahí donde los legisladores deben abrir cauces, para las causas perdidas, y para extirpar a los mayores ineptos, que los partidos propusieron y los electores “votaran”, cuando ahora no tienen capacidad de “botarlos”

Malos, quién lo duda, corruptos, mucho más, los que llegaron a gobernar por el PRI, pero, peores, mucho peores, aquellos a los que el PRI les impidió llegar, y que, en una postura de ganar perdiendo, (el pueblo) propusieron los partidos que solos nunca habrían vencido; y esto es una constante.

Por otro lado, a instantes de que se entregará el segundo informe presidencial, de acuerdo a lo que mandata la Constitución y leyes que la reglamentan, pocos segundos después, ya los partidos y algunos ilustrados representantes populares, han lanzado juicios fulminantes o, fulminatorios, si usted gusta, dando pelos y señales, de algo que aún no han podido conocer.

Por otro lado, asistiendo a cambios que pueden llegar a ser de muy profundo calado y transformar la cara, conducta e idiosincrasia de los Mexicanos y por ende, del México en que algún día intentamos actuar; hoy ya ni nos admiten ni nos invitan, pero del que seguimos siendo parte y actores, al menos en el fisco y las elecciones… bueno, algunos consejos a los nietos, quienes, por cierto, ya no nos ven ni nos oyen…

Que si el imperio o la república… que si el centralismo o el liberalismo… que si de nuevo el imperio fruto de estrategias hegemónicas… que Porfirio no hubiera sido “si Juárez no hubiera muerto”… que si Madero… que si Villa (Arango)… que si Zapata… que la ceguera de ojos y de oídos… que la traición… que la fuerza… así nos llega Obregón; Calles el institucionalizador… que nos aparece Cárdenas… con coyuntura mayor, que muchos idolatran como dogma, cuando sólo fue reacción…

Hasta dónde podrán llegar los cambios que han dado en llamar “reformas”; porque tal como usted sabe, reformar es bueno, es progreso, es posibilidad… y, conservar, es malo, es reacción, es estancarse, es traicionar al “pueblo”, que de sufrido, se calla… y, qué dirá el hijo de la Sra. Solórzano…

Que la implantación, que es el vocablo castellano, no el invento “manchesteriano” de implementar, si, la implantación es lo más importante, y habrá que ver que entiende el Ejecutivo por ello.

El futuro y calado que lleguen a tener las reformas depende los reglamentos que habrán de expedirse y de la estricta o laxa aplicación de que de ellos se haga. Es decir, depende del Ejecutivo y de la firmeza de la Presidencia. Cabe recordar que el Poder Ejecutivo solo lo preside el Presidente, pero lo forma todo su gabinete, los designados y toda la burocracia.

¿Están todas las “capas” del Ejecutivo debidamente permeadas para aplicar los futuros reglamentos, para hacer efectivas las Leyes que hacen honrar la Constitución…?yo creo que muchos de ustedes sí lo verán, sí lo sufrirán, sí lo gozarán; mientras, en Oaxaca, se sigue permitiendo, casi, fomentando la voz contraria, por la terrífica presencia de un gobernador sin voz, sin palabra… ¿Es mejor eso, y los resultados del ejemplo, que unos trastornados guerrilleros en la sierra…? Preguntémosle a Sebastián…

El trozo de hoja

Esta no es la narración ni la crónica de la hoja que los enamorados dividen en trozos irregulares y que se prometen guardar entre las páginas de un .libro, para reconocerse en un reencuentro, ignorando que, las hoja, se secan y pueden deteriorarse fácilmente… como el amor, exactamente como el amor, lo que imposibilita un reencuentro feliz, las dos piezas no coincidirán, casi seguro serán distintas.

Tampoco es el trozo del mapa de tesoros y piratas que, seguramente, su original se parió en tres; una parte guarda el punto del encuentro del tesoro y los otros dos, parte de la ruta para arribar al oro joyas y fortuna que significarán el éxito. Dos creen tener la mitad y. el tercero, no le encuentra a su parte ni sentido y, posiblemente, ni valor. Únicamente un experimentado analista de pergaminos, y conocedor de las argucias y trampas de piratas, podrá guardar con fe cualquiera de las partes y esperar, pacientemente, a que los otros buscadores se encuentren con él; es un problema de tiempo y de mucha fe… algo cercano al dogma, debes creerlo para que la comunidad te conserve, pero nunca encontraras un dogma racional, por ello: es dogma.

Es como la verdad periodística, coyuntural y acotada, sólo un trozo de la información completa que va, lentamente, develando el tiempo, lo que permite grandes confusiones y no pocas calumnias que se aclaran, pero que no se diluyen, conforme se va revelando la verdad histórica, que en el sureste mexicano, allá por Chiapas, dirían, la verdad verdadera…

La boja que se pierde por el  viento, rebaza el límite, y cae al mar por el acantilado, dejando, para siempre ignorada, la razón de las que la precedieron. Si era de amor, para un enamorado, casará llanto y desconsuelo, si era de negocios, siempre se pensará en pérdidas o fraudes cuantiosos y, si fuese de los hijos, generará lágrimas cuantiosas en la madre, que ignorará, posiblemente para siempre, el final de los sucesos que le narran.

El libro al que el malvado, lleno de egoísmo y de soberbia, arranca, por prejuicios, resentimientos, frustraciones,  la hoja clave, o el final de la historia, del suceso.

Solo pedazos de historia inconclusa, llena de llanto desgarrador, dolor profundo en el pecho, desconcierto, desasosiego, coraje, y más, según sea el caso. También, deseos de venganza, celos, creación de planes de revancha, maquinación de emboscadas, de recuperación del ego humillado. Incompleta información

Ahí veo a Hypatia, en los últimos instantes de su vida cruelmente arrebatada, recordando a Cirilo, por provocar la quema de la biblioteca; siglos perdidos, tesoros que nunca podrán ser recuperados, obscurantismo, delito de “lesa humanidad”.

Hay más, incompleta información, querer conservar el último folio para no permitir que la información plena se conozca, conservarla egoístamente es el propósito, sólo yo la tengo sólo yo la manejo, sólo yo la otorgo, yo siempre la niego; quien la quiere que  ruegue por ella, que pague su precio… el precio yo lo fijo…

Que estas letras no corresponden a la página, que el grupo siente que es nuevo, que no es historia, que es muy fresco, que aún no llega a rancio… Pero es tan viejo como la historia misma, lo ha repetido, lo está repitiendo, lo repetirán; no aprenden del pasado… Dar la información completa, dejarla manejar, es la pieza clave para que la historia sirva a todos…

Los hechos de estos días

Pues muchas cosas se están sucediendo, mis contemporáneos y yo ya no lo veremos del todo, pero grandes cambios se han comenzado en todos órdenes y niveles.

La hegemonía de los EEUU ya no es algo que se vislumbra, simplemente está sucediendo; la importancia de Europa está tomando su nivel regional y, el gigante que surge, China, avanza inexorablemente con un tema muy claro: “no importa de qué color sea el gato, lo importante es que cace ratones”, ya nadie lo para.

Rusia tendrá que pensar mucho cuando resolverá integrarse plena y formalmente a Europa, que ella no es China, ni se entenderían. Las naciones emergentes de Asia, están en Asia y ese es y será su destino; como lo es el nuestro, para bien o para mal, el decadente norte que continuará siendo dominante aún por décadas hasta que comprenda que sin nosotros y el Canadá, ya no podrá seguir, ahora eso es a la inversa, Brasil, Chile, Argentina y algún otro, serán contrapeso, pero aliados con capacidad de negociación, lo que ahora no tienen.

África, África está muy dispersa, su horizonte es muy lejano, si es que lo tiene, pues su disgregación la mantiene internamente distraída y, sin ser yo racista, su color aún la relega, y eso, aún sin considerar lo extendido del Islam con su futuro extremista o intolerante, que todavía está por definirse…

Regresando a América, aquí algo se está haciendo, en grande, y bien, según yo. El Presidente de la República Oriental del Uruguay, ha decidido y ganado en su democracia, desmitificar la posición irracional y extremista, de mística imperial y autoritaria, si no son lo mismo, respecto a intentar controlar a la sociedad con prohibiciones insostenibles cuando la clandestinidad colecta más ingresos de los que puede enfrenarle el Estado; cuál Estado, les diré, casi el que quieran.

Por nuestra parte, en México, se están realizando grandes cambios, como, posiblemente, no los ha habido así desde la llamada Revolución Mexicana, dispersa y confusa.

Estos ajustes mayores han alterado fuertemente a los que la ambición, la ideología o la dádiva, hay de los tres y combinados, los coloca en la izquierda dispuesta a todo, todo lo que a su alcance pueda ejercerse con tal de llegar a sus fines; como ayer, casi al terminar la noche, se amenazó claramente, desde la tribuna de la Cámara de Senadores (Alejandro Encinas Rodríguez y otros),  de revuelta popular o levantamiento social, si los cambios continúan el camino por el que, para bien o para mal, los llevan las mayorías legales, no sé si legítimas, pero creo que sí.

Pareciera que los pájaros quieren tirarles a las escopetas; parece también que estamos en las guerras intestinas que se sostuvieron desde 1821 hasta la pérdida de la mitad del territorio y la Invasión Francesa, que más respondía a razones hegemónicas internacionales que a “querer ayudar,  ordenando a México”. Liberales y Conservadores, las fuerzas del devenir constante, en una gran insuficiencia de conciencia ciudadana, de que el ciudadano se sienta eso, ciudadano mandante.

Dentro de este camino, mucho hemos criticado al Presidente de la República, nos parece suave, condescendiente más allá de lo racional, y cuando parecen suavizarse, los maestros, ya se esta levantando a los grupos sociales populares, más dispersos y con mayor dificultad para negociar y controlar.

Pero parecería que es plan con maña, pagar el costo y precio político necesario, para que salgan todas las “grandes reformas” y, una vez que estas sean reformas y la Constitución se ajuste sus nuevas vestiduras, ciertamente con mayor escote y más corta falda, podremos encontrarnos con otro carácter presidencial. Con las reformas logradas, habrá que madurarlas, encausarlas, consolidarlas, pero ya no hay que negociar con los demás de manera imprescindible, los cambios de fondo ya estarán hechos, los avances, algunos, durarán hasta lustros otros son de mediano plazo…

Cambios les esperan a nuestros sucesores y, nosotros ya los veremos del todo. Espero que nuestros hijos y nietos, que yo los deseo libres,  sepan y puedan enfrentarlos y sortearlos, acordes a lo que su muy particular visión les dicte, en los órdenes ético y moral, que ello rija sus vidas.

El juego de los inentendibles

Entre Mancera y el gobernador de Oaxaca, hay un juego perverso de haber quién es más insensible con la sociedad y mejor protector de la impunidad, el abuso y la prepotencia. Se aúna al gripo de lo inentendible el gobernador de Michoacán y, extrañamente, se aleja un tanto el de Guerrero. Se juega, a más, quien es más insensible con las demandas y las justas inconformidades sociales, de la sociedad civil.

Ni uno más, y ya los hicieron tragar tierra o, como dicen, tragarse sus palabra y, sin reacción alguna. Pasen señores, que no les vamos hacer cumplir la ley y podrán componer los tejidos sociales a su antojo, que ya hace rato que, “al diablo con las instituciones”, se ha vuelto nuestro credo. Solo amenazamos de dientes “pa´fuera”…

Y véase, irrumpir a un lugar privado sin autorización ni permiso, destruir, incendiar y saquear (robar) y, para que no quede duda, dar una conferencia de prensa en que se dan a conocer los hechos violatorios de derecho, todo eso frente a la policía que debe perseguir delitos por oficio, poner orden, todo eso, constituyen las mejores prácticas de un buen gobierno de izquierda democrática. ¿Qué es la izquierda en  un Estado de Derecho”.

Tomar a pedradas y con notoria mayoría escuelas defendidas por niños y padres de familia, que, ciertamente, han pecado por querer que sus hijos estudien en paz, para intentar aprender a tener progreso, ello, cuidado permitido y protegido por la fuerza pública que “defiende a la sociedad, es prueba de aplicar la justicia y reconocer la razón de la sociedad que quiere paz, trabajo, estudios, terminar la impunidad y lograr justicia en un Estado de Derecho.

Que nos espera a los que acudimos a elegir a nuestros representante, que cumplimos con la norma y el orden en forma cotidiana, que respetamos a nuestro próximo, que somos tolerantes con los que, haciendo también todo lo demás, disienten en formas y métodos de lograr acuerdos y cambios en lo que, de alguna manera, es perfectible y se entiende puede ser variado, según el caso y el sujeto, a la derecha, al centro o a la izquierda.

Y lo más curioso es que ahora, a ello, le llaman: “ejercicio de la democracia”

Los que creemos en que la inteligencia, por medio de su gran instrumento, la razón, el análisis. hace posible plantear opciones que, en la mesa del diálogo o del entendimiento, pueden lograr acuerdos de ventaja para la sociedad, que no para facciones de cualquier naturaleza.

Cuál es el juego que nos dejan para jugar aspirando a la paz, al entendimiento, a la armonía social, al trabajo, en el Estado de Derecho…

¿Qué tan lejos estamos de un estado de beligerancia?

Es difícil de descifrar el rumbo de los cambios, de las inconformidades, sea cual fuere su origen; por un lado aún están los afamados y muy disminuidos Zapatistas, por otro, aún quedan reductos de las guerrillas de la sierra de Guerrero-Michoacán; así mismo, la organizada CENTE, que con disciplina dictatorial y control espartano ha mostrado músculo, a ello debemos agregar las “autodefensas” que arraigan en Michoacán y Guerrero, y se asoman en otras regiones, por último, los cárteles tradicionales de la delincuencia; zetas, templarios familia michoacana, y los que aún conservan el nombre de cárteles, ahí donde aún manda y comanda el famoso “Chapo”, y los otros, sus contrarios.

Todo se origina en una vocación nacional de de rebeldía, de inconformidad, de quítate tú para ponerme yo…y, si no, me revelo…todas alimentadas por el autoritarismo, y sostenida por las ideologías extremas, radicales, por visiones angostas y casi bucólicas. Todo ello halló cobijo y modo en el manejo de la droga y, como no se les paró a tiempo el flujo de recursos, se han fortalecido en fuerza y control por terrorismo (miedo) pues crecieron y ahora el espectro de origen de recursos se ha ampliado a todas las posibilidades imaginables.

Los de menor categoría se alimentan de los asaltos, chantajes, extorciones secuestros y los jefes se quedan con todo el producto de la droga, son interdependientes, pedro hay grupos y “clases”. Así es una proliferación incontenible. Mientras les hemos hecho el “caldo gordo” a los del norte, ellos se drogan, inician el proceso de legalización, que llegará a lo que existió hasta principios del siglo XX; mientras, todos los capturados allá, son extranjeros, predominantemente mexicanos y, la drogadicción se sostiene, mientras acá filtramos, para que llegue lo “bueno”, y ponemos a los cadáveres y a la descomposición, profunda, del tejido social

Párrafo propio merece la corrupta policía, ¿cuál?, la que piense y quiera, los Presidentes Municipales, muchos, muchos más de lo que creemos, Diputados estatales, federales, Senadores, políticos y más, incluidos Gobernadores y, no aumente, altos funcionarios de los Municipios Estados y Federación. Una amplia, profunda, bien engrasada red de corrupción.

A ello agregue los extremos de los románticos, “derechos humanos”, que liberan criminales en lugar de “reponerles el proceso” que fue lo que estuvo mal, y, liberados, los crímenes sí cometidos… ¿qué?…

No veo claro tampoco, la suave política de manejo que tolera, paga, premia y fortalece a “rebeldes” ideologizados, guerrilleros entrenados, que, pidiendo lo imposible, se eternizan en franca beligerancia, amenazan, roban, matan, atacan a padres de familia y niños y, nada, no pasa nada… ¿Cuál es la estrategia de Gobernación y la tolerancia y permisividad del Presidente Peña? Pueden hacer lo que quieran con las ciudades, con los Estados y con los ciudadanos, y son protegidos y nutridos con sueldos y premios no devengados, no ganados.

Creo que en un desorden ideológico, de intereses, a veces contrarios, y de dispersión geográfica, va integrándose, creciendo, la “masa crítica” el “cuanto bastare para” que surja una inestabilidad realmente beligerante y que la sociedad, lo que de ella queda, se vea obligada optar por el más fuerte, el que asegura, dejando al lado al medroso o al menos ´poco claro, que ni puede, ni quiere, ni sabe aplicar la ley.

La ley, hoy ya vale preguntarse… ¿Qué es la ley…?

El San Luis de ayer, su herencia que, aún se vive hoy.

Quizá alguno de los que sí saben pueda abundar sobre algo que leí ya no sé cuándo ni dónde, la memoria tiene archivos muertos, demasiado ocultos, muy difíciles de acceder.

Se decía que la ciudad estaba encerrada en un cuadrante que constituyó la iglesia, (casualidad o propósito): Para acceder a su centro había, necesariamente, que parar por un convento o iglesia, todo viajero era recordado de que la religión vigilaba al área urbana, estaba en el área urbana, dominaba el área urbana… y, además, tenía quien la ayudara, con las armas, si era preciso…

Por el oriente El Carmen; por el sur, La Merced; por el poniente, Tequisquiapam; y, por el Norte Tlaxcala. Todas ellas en permanente competencia pero, ante los feligreses y seres racionales, luchando por el mismo fin, la “salvación de sus almas”, siempre en pecado, porque a “Eva”, ayer, como hoy, se le ocurrió amar, ejercer su potencial hormonal; de ello, hasta hoy, occidente sigue siendo culpable… (¡Qué bueno que lo ejerció…!)

Por otro lado su centro político y comunal o cívico, estaba alrededor de un cuadrante que flanqueaba el poder militar: el Ejército; el poder político: el Gobernador; el poder comunal: el Ayuntamiento; y, el poder religioso: la Iglesia.

Todo se sucedía ahí, el cuidado del territorio; el del orden o conducción de los intereses mayores; el de la armonía comunal o de los intereses menores; y el de los dictados religiosos, poder que decíase a si mismo, superior a los demás; pero que ahí estaba igual que todos ellos: en iguales conflictos, similares ambiciones, semejantes corrupciones, equivalentes destino, conducir, controlar, simular, permitir, o morir…

Ese poder reunido en torno a la Plaza de Armas, estaba vigilado de manera permanente de uno a otro y entre todos, no era necesario “jalar un poco la gasa del visillo”, para saber quién entraba, a donde y luego con quien, a dónde salían y con quien y cuentos y así… así…. así…se generaba la armonía y, la toma del chocolate con picatostes, igual que el arrió de bandera y el despacho de los Lanceros, los Rurales, la Santa Acordada y demás…según necesidades y épocas.

Todas estas marcas a hierro persisten, existen, en mayor o menor grado, las heredaron los de ahí, las asimilan los que llegan, o se encuentran fuera de la comunidad.

“Así es mi tierra, morenita y luminosa, así es mi tierra tiene el alma hecha de amor,,,”

Nos encanta vivir en el disimulo y el “veo pero no me entero”, “lo sé, pero no lo digo” lo “atestigüé, pero no atestiguo”